En 2011, los cuatro más grandes consorcios de investigación sobre el alzheimer en América y Europa se unieron para formar el Proyecto Internacional del Genoma del Alzheimer (Igap, sus siglas en inglés). Estos diferentes grupos de científicos lograron en tiempo récord reunir información de 25 mil pacientes con esta enfermedad y de otras 49 mil personas sanas que sirvieron como grupo control.
En total se revisaron secuencias genéticas de 75 mil personas provenientes de 15 países, lo que le da al estudio una mayor diversidad genética.
Después de analizar todos estos datos, lograron identificar 11 nuevos genes que están relacionados con este mal y también con otras enfermedades neurodegenerativas, como el parkinson y la esclerosis múltiple.
Según el estudio, los nuevos genes tienen relación con la respuesta inmune y la inflamación. De hecho, descubrieron que también están asociados con la esclerosis múltiple y la enfermedad de Parkinson, lo que sugiere que las tres enfermedades -que tienen en común la acumulación de proteínas anormales- también podrían tener un mecanismo similar y, por lo mismo, podrían responder a las mismas drogas. Otros genes descubiertos tienen relación con la migración celular y el transporte de células grasas en el cerebro.
“El descubrimiento de nuevas vías es muy alentador, teniendo en cuenta el limitado éxito de medicamentos que hasta ahora se han probado para el alzheimer”, dijo en un comunicado Margaret A. Pericak-Vance, del Sistema de Salud de la U. de Miami (EE.UU.).
Hasta 2009 se conocía sólo un gen relacionado con esta enfermedad. Estos 11 nuevos se suman a otros 10 que ya se conocía.
“Nuestros hallazgos nos acercan hacia la identificación de nuevas terapias para el alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas. Vamos a seguir ampliando y analizar los datos para comprender mejor las influencias genéticas de este mal y hallar nuevas terapias”, agregó la experta.
“La colaboración entre los investigadores es clave para discernir los factores genéticos que contribuyen al riesgo de desarrollar la enfermedad”, dijo Richard J. Hodes, director del Instituto Nacional de Envejecimiento que patrocinó la investigación. “Estamos muy contentos por la velocidad y el rigor científico con el que Igap y otros consorcios de genética están avanzando en la comprensión de la enfermedad de Alzheimer”, agregó.